CLAUSURAN EL PARAISO DE SICUANI

Uno de los tantos antros del vicio ubicados en el  barrio de Techo Obrero de Sicuani, por fin fue clausurado por las autoridades de la provincia de Canchis, quienes vienen cumplimiento el Plan Estratégico de Seguridad Ciudadana “Canchis Segura 2011″, esta intervención se realizó con  25 efectivos Policiales  al mando del Mayor PNP Charles APAZA PILARES Comisario de Sicuani, conjuntamente con la representante del Ministerio Público Dra. Emma CORJENO VERGARA Fiscal Provincial de Canchis, Sr. César SALIZAR Gerente de Desarrollo Social de la Municipalidad Provincial de Canchis y personal de Serenazgo,  quienes procedieron a la clausura del establecimiento Nocturno Night Club “El Paraiso”, ubicado en la calle Los Claveles s/n de la ciudad de Sicuani, al mismo tiempo que se hizo el recojo de muebles, consistentes en sillas, sillones, equipos de sonido, prendas de dormir: colchones entre otros, los mismos que fueron llevados al depósito de la Municipalidad Provincial de Canchis.
El propietario y conductor del local identificado como Fortunato  Jorge CHARREZ VALDIVIA (56),  fue citado a la Dependencia Policial del Sector para las acciones legales correspondientes, debido a que el establecimiento no contaba con autorización de funcionamiento, donde jovencitas laboraban como “damitas de compañía”, en tanto que en las habitaciones del tercer nivel,  se halló preservativos usados y nuevos, lo que haría presumir que también se ejercería el meretricio.
Las autoridades intervinientes constataron que el lugar se encontraba en completo estado antihigiénico, maloliente, colchones sucios y desaseados, habitaciones pequeñas y hacinadas, donde pernoctaban las jovencitas.
Finalmente los vecinos del barrio de Techo Obrero felicitaron la acción coordinada de las autoridades de Canchis, asimismo solicitaron que se realice patrullajes permanentes para que los dueños de estos antros no vuelvan a reabrir las puertas del “paraíso” que más parece el infierno de la ciudad donde se producen actos delincuenciales y hasta asesinatos.

Por: Denis Hualla Vega